La Gimnástica mereció más pero finalmente se lleva un punto de San Lorenzo (0-0)

La Gimnástica visitaba el campo del líder destacado de la categoría -8 puntos respecto a los de Pablo Lago, que hasta hoy eran su inmediato perseguidor-. Con la necesidad de ganar para recortar la distancia y avivar las opciones de hacerse con el campeonato, los blanquiazules pelearon sobre el barro de San Lorenzo y merecieron llevarse los tres puntos. A pesar del resultado final sin goles, ambos equipos dispusieron de oportunidades como para haber abierto la lata. De hecho, Nacho Rodríguez ya celebraba el primer tanto de la tarde cuando un charco de barro bloqueó su remate en la línea de gol. Los pejinos transmitieron la mayor parte de su peligro a través del balón parado.

El técnico asturiano de la R.S. Gimnástica optó por modificar un tanto el sistema respecto del habitual desde que aterrizó en Torrelavega. El 1-4-1-4-1 quedó desbancado por un claro 1-4-4-2, con la aparición de Cagigas como delantero acompañando a Nacho Rodríguez. El espigado jugador completó una gran actuación, dejando todo en el terreno de juego e incansable a la hora de tirar desmarques al espacio ofreciendo líneas de pase a sus compañeros. Por lo demás, Pablo Lago decidió variar realmente poco en cuanto a nombres y alineó a Álex Ruiz bajo palos; Fer y Fermín en los laterales; Camus y Cote pareja de centrales; en el doble pivote un inconmensurable Víctor respaldado por Palazuelos; en las bandas Vitienes y Perry; y en la punta de lanza el citado Cagigas además de Nacho Rodríguez.

Alineación del C.D. Laredo: David, Toño, Bárcena (Ander, 77'), Mier, Lila, Felipe Peredo, Manu Ortiz (Roberto Cano,82'), Luis Gómez, Vinatea, Camino (Óscar San Emeterio, 56'), Montiel.

Esta tarde, en San Lorenzo, se vivió un partido de fútbol de los de antaño. El magnífico césped del estadio aguantó las intensas lluvias, al menos en los primeros compases. Después, fruto de las continuas lluvias y la duración del encuentro, se convirtió en un auténtico partido de los de siempre, con la lucha, la garra, y la intensidad como principales denominadores. Ambos equipos no renunciaron a rasear el balón, aunque bien es cierto que el miedo a conceder ocasiones y el estado del tapete obligaron a jugar directo y reforzar las zonas de caída de balón. 

La Gimnástica, muy intensa desde el principio, salió a buscar al Laredo, adelantando la línea de presión considerablemente y gozando de varias oportunidades. Sin embargo, el primer disparo a puerta fue de los locales, por medio de Manu Ortiz, que chutó raso deteniendo sin problemas Álex Ruiz. A partir de ahí y hasta el ecuador del primer acto, las ocasiones únicamente llevaron el sello blanquiazul.

Nacho Rodríguez, peleón a la par de desafortunado en la ocasión que tuvo en la segunda mitad, hurgó en la zaga del Laredo para cazar un balón en el pico del área, entrar en este y buscar atrás a Cagigas. Aunque en un principio no logró hacerse con el cuero, se repuso a tiempo para, desde la frontal, provocar el primer "¡Uy! en las gradas del reformado San Lorenzo. 

De nuevo Nacho Rodríguez, apenas un minuto después, embolsó un desplazamiento en largo de Camus, para provocar una falta muy peligrosa en el semicírculo del área grande. El capitán Camus decidió sorprender por encima de la barrera, pero su disparo no cogió portería. La afición visitante, muy numerosa y activa en las gradas, vio como su equipo había comenzado el encuentro con ciertas garantías de poder llevarse los tres puntos del feudo pejino. 

Poco después continuaría la búsqueda del gol por parte de Nacho Rodríguez. Primero remató una jugada a balón parado, desbaratada por un defensor que taponó enviando a córner. Después, un tanto escorado pero dentro del área, sacó un potente chut raso, obligando a David a desviar a saque de esquina.

Tocado pero ni mucho menos hundido, el Laredo decidió aterrizar en el partido. Para ello, hizo valer su mejor arma: la estrategia. El ecuador del primer tiempo fue para los locales, que pudieron adelantarse por medio de Camino. El veterano media punta consiguió cabecear dentro del área en dos ocasiones, pero en ninguna de las dos vio puerta. Entre medio de ambos testarazos, Montiel probó desde lejos con un lanzamiento de falta que despejó Álex Ruiz a córner, y también se pidió un penalti sobre Vinatea al caer derribado por Camus. El colegiado, lejos de señalar la pena máxima, incluso amonestó a uno de los jugadores locales por protestar.

Antes del descanso, la Gimnástica pegó otro arreón en busca de irse camino de los vestuarios con ventaja en el luminoso. Cagigas tuvo la más clara, a los 42', al recoger un balón suelto en el área chica y estrellarlo contra David. La más clara hasta el momento, sin duda alguna. Vitienes también buscó el primero en un contraataque en solitario, pero su remate se fue excesivamente alto. Descanso.

Comienzo atractivo el de la segunda mitad. Cuando solo habían transcurrido dos minutos, tuvo lugar la ocasión más clara del partido. Perry encara desde la izquierda a Toño, logra disparar a portería, David rechaza y Nacho Rodríguez, totalmente solo, empuja el balón hacia portería. La afición, jugadores y hasta el propio Nacho celebraban ya el 0-1 cuando un charco de barro frenó la trayectoria del esférico, dejándolo estancado en la mismísima línea de gol. Mala fortuna para un Nacho que había buscado el gol por activa y por pasiva y que, cuando más cerca estuvo de conseguirlo, nuevamente vio la cruz de la moneda. 

Enfadado por la acción anterior, el ariete le pidió a Camus el lanzamiento de una falta a unos 25 metros de la meta de David. Seco y potente, su chut salió lamiendo la cruceta. Desde ese momento, el cansancio físico le jugó una mala pasada a los de Lago, que mantuvieron la intensidad pero vieron como sus ocasiones disminuyeron hasta el final del encuentro. De hecho, fueron los locales quienes más se aproximaron, aunque sin causar excesivo peligro.

Felipe probó desde fuera, encontrándose con Álex Ruiz, muy seguro durante los noventa minutos. El propio Felipe lo intentaría poco después con un lanzamiento de falta intentando aprovechar la rapidez del terreno de juego. El cancerbero francés respondió a la perfección despejando el peligro. Poco antes Mier, en una jugada de estrategia, obligó a Álex a intervenir. 

Los últimos minutos no fueron de gran brillantez y únicamente se acercó la Gimnástica, por medio de Cagigas y de Vitienes en la última jugada del partido. 

Con este empate, tanto Gimnástica como Laredo rompen su racha de siete victorias consecutivas. El decano del fútbol cántabro pierde la segunda posición tras la victoria del Escobedo y tratará de reencontrarse con la victoria el próximo domingo, a partir de las 17:00 horas, en El Malecón, ante la Cultural y Deportiva Guarnizo.

Resumen del partido: