Los locales empataron en el 85’ fruto de una segunda parte donde se mostraron muy ofensivos.
R.S. Gimnástica: Álex Ruiz, Fer, Fermín, Ramiro, Cristian, Cusi (Camus, 89’), Vitienes, Palazuelos, Gio (Salas, 60’), Leandro y Rozas (Luis Alberto, 88’).
Arenas Club: Fid, Jordan, Gayoso, Pozo, González, Matador (Llenera, 83’), Zamorano (Dani López, 77’), Uranga, Xeber, Azkue y Jimmy (Aitor Ramos, 68’).
Goles: 0-1. Jordan (min 45+1). 1-1. Palazuelos (min 84).
Dirigió el encuentro el colegiado navarro Garcés Bargada, que amonestó a los locales Cristian, Cusi, Ramiro, Fer y Vitienes, y a los visitantes Xeber, Matador y Jordan, del Arenas.
Estadio El Malecón. 3.000 espectadores.
Reparto de puntos que no dejó satisfecho a ninguno de los dos. A la Gimnástica, porque un empate a estas alturas con las necesidades clasificatorias se antoja como insuficiente, máxime tras el dominio abrumador de los blanquiazules en la segunda mitad. Y eso que consiguieron igualar en el 85’ gracias a Palazuelos, motivo por el cual los vizcaínos se fueron descontentos tras ir por delante en el marcador desde el 45’.
Porque eso fue prácticamente lo único que sucedió en el primer acto. Jordan se aprovechó de un error en la barrera para batir a Álex Ruiz justo antes de que Garcés Bargada señalase el camino de la caseta. Antes, la intensidad había provocado que las áreas se viesen solo de forma testimonial. Aunque si hubo un equipo que lo intentó fue la Gimnástica, que plasmó su fútbol directo sin ocasiones, a pesar de que varios balones rondaron la portería defendida por Fid. Fer envió un zapatazo desde la frontal cerca de la escuadra, mientras que Vitienes, desafortunado en los últimos metros, disparó muy alto desde una posición un tanto escorada.
Los denominados goles psicológicos lo son aún más –para mal- si observamos la situación clasificatoria de los de Dani Mori. Pero los pupilos supieron reponerse e hicieron méritos para darle la vuelta al marcador. El Arenas limitó sus opciones a contraataques que ejecutó fatal, y a un remate de Azkue en el segundo palo que envió al lateral de la red.
Lo demás fue un acoso y derribo de la Gimnástica. Salas entró por Gio y dotó de más dinamismo al frente de ataque. Las incursiones y posteriores centros de Fermín, Fer, Rozas y Vitienes hacían prever que en uno de ellos llegaría el empate.
Leandro también fue un quebradero de cabeza para la zaga vizcaína, aunque le faltó precisión en el área rival. Protagonizó una acción individual en la que sorteó a varios rivales y acabó estrellando el cuero contra Fid; previamente, no consiguió rematar un centro certero de Vitienes que marró en el área chica.
El gol parecía cuestión de minutos con los blanquiazules volcados en ataque. El Arenas defendía con uñas y dientes su renta, y, con el paso de los minutos, amenazaba menos al contraataque. De nuevo Vitienes puso un centro medido al corazón del área pero Salas tampoco estuvo acertado en la definición. Y Leandro, de nuevo, remató alto tras un error inesperado de la zaga vasca.
Seguirían llegando las ocasiones en el tramo final por parte de Salas, en un centro-chut tras robarle la cartera a un defensor y que a punto está de colarse en propia portería. En ese saque de esquina, Ramiro reventó la escuadra con un cabezazo impecable. No acababa de llegar el tanto y los de Mori seguían buscándolo a la desesperada.
Y tanto lleva el cántaro a la fuente que, en uno de los infinitos centros laterales de Vitienes, volvió a elevarse Palazuelos para ponerla en la escuadra. 1-1, minuto 85. La épica llegaba de nuevo a un Malecón que volvía a confiar en la remontada.
Pero la veteranía del Arenas salió a escena para detener el partido y cortar el ritmo de los blanquiazules, que no volvieron a asustar a su rival. Sin tiempo para más, final con empate a 1.
Este resultado deja a los torrelaveguenses a 4 puntos de la promoción de descenso y a 5 de salir del descenso. Posición, esta última, marcada por el Club Deportivo Izarra, próximo rival de los cántabros, en Merkatondoa, el domingo 7 de abril a las 17:00 horas.