Los blanquiazules superaron al Bezana después del empate a uno final en los 90 minutos reglamentarios.
R.S. Gimnástica: Peón, Fer, Fermín, Camus, Chamorro, Cusi, Emilio (Vitienes, 86'), Palazuelos, Salas (Ito, 69'), Roberto y Prada (Saúl, 75').
CD Bezana: Vía, Jairo, Bárcena, Sobrado, Conde, Carlos, Christian (Chema Mato, 89'), Jaime, Mario Saiz, Nico y Junior (Marquitos, 60').
Goles:
0-1. Prada (min 58)
1-1. Marquitos (min 68)
En los penaltis: gol de Marquitos; gol de Camus; gol de Jaime Hoyuela; gol de Cusi; parada de Peón a Conde; gol de Roberto Sierra; gol de Mario; gol de Ito; fallo de Nico.
La Gimnástica consiguió clasificarse para la final de la Copa RFEF -fase autonómica- tras superar al Centro Deportivo Bezana en los penaltis. Allí se medirá al CD Tropezón, que hizo lo propio ante el Cayón (2-1). Ambos conjuntos se darán cita en El Sardinero el próximo 27 de agosto.
El billete a la final no fue ni mucho menos fácil. De hecho, los blanquiazules sufrieron durante buena parte del encuentro las acometidas locales. En la primera mitad apenas se produjeron acercamientos más allá de un disparo escorado de Junior, por parte local, y de sendos disparos de Emilio y Palazuelos que no consiguieron abrir el marcador.
Prada, en la reanudación, consiguió superar a Vía con suspense para poner el 0-1 en el marcador. Poco después igualaba Marquitos, pues el ex gimnástico se echó a las espaldas a los suyos y revolucionó la contienda. Envió un misil tierra-aire a la escuadra de Peón para empatar y monopolizó las acciones de ataque del conjunto bezaniego. Los de Santa Cruz de Bezana dominaban el esférico y parecían estar más cerca del gol, aunque las mejores ocasiones llegaron al final y por parte gimnástica. Fueron Roberto Sierra, en una magnífica jugada individual que desbarató Vía, y Chamorro, con un disparo lejano que rozó el poste, los que pusieron en vilo el empate final.
Después, en la tanda de penaltis, la Gimnástica se mostró solvente anotando sus cuatro lanzamientos -Camus, Cusi, Roberto e Ito-, mientras que el Bezana erró dos.