El filial blanquiazul se quedó a las puertas del ascenso al perder la segunda plaza en el último envite que se pudo disputar antes de la llegada del covid 19.
La RFEF decidió la semana pasada decretar el final de las competiciones no profesionales y también las de categorías inferiores con los correspondientes ascensos. Estos recaen sobre aquellos equipos que se encuentran en dicha posición a la finalización del campeonato a 13 de marzo. Por tanto, el cuadro torrelaveguense, que había ocupado durante la gran mayoría del campeonato esa posición de ascenso, se queda a las puertas tras perder contra el CD Tropezón (1-0) en el último choque antes del parón definitivo.
Y es que los blanquiazules finalizaron la primera vuelta en la plaza que otorga el ascenso e, incluso, una semana antes del final de la competición, se situaban en dicha posición. La derrota en Santa Ana elevó al Tropezón a la zona de privilegio con el consiguiente inesperado y desafortunado desenlace para los del Malecón.
Sin embargo, una situación tan extraordinaria como la vivida con el covid-19 no puede empañar los esfuerzos que dedicaron plantilla y cuerpo técnico en retornar a la categoría de oro del fútbol juvenil. La suerte ha deparado que este año finalmente no puede ser; no en vano, la próxima temporada, cuando las autoridades sanitarias lo permiten, el filial blanquiazul regresará con el único objetivo del ascenso.
Varios futbolistas finalizan, de esta cruel manera, su periplo en el fútbol juvenil, en tanto que otros deciden abandonar el club con la idea de continuar progresando en sus carreras deportivas. A todos ellos, que han formado parte del club durante la presente temporada, la entidad quiere agradecer su dedicación y esfuerzo y les desea lo mejor en su futuro personal y futbolístico.