Los torrelaveguenses volvieron a disponer de varias ocasiones para marcar pero no consiguieron materializarlas.
CD Calahorra Gonzalo, Yasin, Sergio Martínez, Cristian, Echaide, Almagro (Cárdenas, 82’), Sergio Benito (Edu Ubis, 63’), Emilio, Isaac Manjón (Txomin Barcina, 71’), Parla y Carralero.
R.S. Gimnástica: Peón, Fer, Jaume Pol, Ramiro, Luis Alberto, Cusi, Salas, Palazuelos, Leandro (Fermín, 73’), Víctor (Héctor Sánchez, 86’) y Gio (Dieguito Ruiz, 82’).
Goles:
1-0. Isaac Manjón (min 54)
Dirigió la contienda el árbitro Manuel Ángel Pérez Hernández, del colegio madrileño, que amonestó al local Cristian y a los visitantes Víctor y Palazuelos.
Estadio Municipal La Planilla. 1.000 espectadores.
Un quiero y no puedo. La tónica habitual de la Gimnástica a lo largo de la temporada se plasmó, de nuevo, ayer en el Municipal de La Planilla. Los de Mori se despidieron de la categoría de bronce con honor y dignidad, aunque con una nueva derrota a sus espaldas. El gol de Isaac Manjón al comienzo del segundo acto fue suficiente para declinar el partido; bien es cierto que los calagurritanos no lograron el objetivo de clasificarse para la Copa del Rey.
Los contratiempos para Dani Mori comenzaron desde el calentamiento. Primo sentía molestias musculares en el cuádriceps y no podía ser de la partida, entrando Leandro en su lugar.
El atacante de Colindres, en el primer minuto de partido, estuvo cerca de marcar el 0-1 en un mano a mano un tanto escorado que cruzó en exceso. Palazuelos había ganado la disputa aérea y Leandro se había quedado solo ante el meta local.
El Calahorra se hizo dueño y señor del encuentro moviendo la pelota de lado a lado, aunque sin excesiva profundidad en sus ataques. Los blanquiazules esperaban agazapados en defensa en busca de alguna contra que permitiese correr a Salas, Gio y Leandro. El equipo riojano insistió con varios córneres que solventó con facilidad la zaga cántabra, a excepción de un testarazo de Cristian Fernández que se marchó muy desviado.
Por su parte, los de Mori avisaban a balón parado por medio de Leandro y de Ramiro, con sendos remates anticipando al primer palo que salieron rozando el poste. Pese al dominio de la posición del Calahorra, el runrún del respetable riojano hacía entrever que los suyos no estaban cómodos sobre el terreno de juego. Máxime cuando la más clara de todas las oportunidades estuvo en la cabeza de Palazuelos que, contra todo pronóstico, cabeceó mal un sensacional servicio de Salas. La jugada se originó con una combinación entre el propio Salas y Gio, ambos futbolistas jóvenes que demostraron ambición y descaro en la tarde de ayer.
Los cuatro acercamientos de verdadero peligro por parte de la Gimnástica solo fueron contrarrestados por Manjón, que se elevó en el interior del área para rematar desviado en una posición muy propicia para firmar el primero.
La segunda parte comenzó con la tónica de la primera: mayor posesión para el Calahorra pero ocasiones para la Gimnástica. Y es que en el 52’, Salas obligó a Gonzalo a estirarse para desviar a córner su potente disparo. En el citado saque de esquina, Luis Alberto remató en el segundo palo tras la errónea salida de Gonzalo.
El que perdona, lo paga, bien lo saben en la orilla del Besaya. Y así fue, otra vez. Pelota colgada al interior del área, el cuero queda muerto sin que ningún defensor pueda despejar el peligro y Manjón se revuelve para fusilar a Peón. 1-0.
El Calahorra replegó unos metros su línea defensiva y concedió el dominio territorial a la Gimnástica, que trató de fabricar fútbol para llegar a zonas de peligro. No fue así y los locales apenas sufrieron ante un equipo blanquiazul que mostró su impotencia por no poder despedirse con un resultado favorable. Por extraer alguna noticia positiva, en el tramo final debutaron con el primer equipo los juveniles Diego Ruiz ‘Dieguito’ y Héctor Sánchez, que entraron para situarse en el centro del campo.