Los blanquiazules finalizaron segundos el V Memorial Manolo Preciado después de ganar con solvencia al Ribamontán al Mar en semifinales (0-2) y de empatar la final (0-0) con el Racing B, perdiendo en los penaltis (5-4). Pablo Lago conformó dos onces distintos para cada encuentro en busca de adquirir solidez e ir uniendo las piezas de la campaña 2018/19.
Gimnástica y Ribamontán al Mar -conjunto dirigido por Manuel Preciado, hijo de Manolo Preciado- se dieron cita en el primer partido del memorial disputado en Baceñuela (Galizano). El técnico asturiano de la R.S. Gimnástica alineó once futbolistas que completaron el encuentro, quedando el resto de la plantilla disponible para el siguiente encuentro. De esta manera, la alineación titular estuvo conformado por Peón bajo palos; Fer, Mati, Mario Arpide y Fernando Castillo en la retaguardia; Alberto y Palazuelos en la sala de máquinas; Vitienes y Fermín en los costados; y Nacho Rodríguez y Primo en la punta de ataque.
Los encuentros, con una duración establecida de 45 minutos, se caracterizaron por la intensidad y cierta debilidad en las defensas, un aspecto lógico teniendo en cuenta que los equipos acaban de comenzar a rodarse. De hecho, el primero de ellos, entre el 'Riba' y los torrelaveguenses finalizó 0-2 pero ambos equipos pudieron sumar algún tanto más a su casillero.
Bien pronto abrió la lata Rubén Palazuelos con un disparo potente, a la cepa del poste, desde la frontal del área. La jugada, protagonizada por Primo con una arrancada en velocidad por el flanco izquierdo del ataque, dejó entrever las características de un equipo que, con espacios a la espalda de la defensa rival, muestra gran parte de su poderío ofensivo.
El encuentro continuó por estos lares y las ocasiones no pararon de llegar: Alberto estrelló el cuero en el palo tras quedarse mano a mano ante Álvaro, el propio meta del Ribamontán detuvo una pena máxima a Nacho Rodríguez, y los locales reclamaron penalti por una caída de Zúñiga en el área.
El cansancio comenzó a notarse en las piernas de los jugadores locales, que vieron como su defensa hacía aguas y de nuevo Fer se plantaba solo ante el portero. De nuevo, excelente respuesta del cancerbero y Primo que no conseguía transformar el rechace. Tuvo el empate el 'Riba' en una gran internada de su lateral izquierdo, que logró zafarse de varios defensores y acabó por fusilar el larguero de Peón. La sentencia llegó por parte de Primo, que ya se había quedado previamente delante de Álvaro -se le quedó atrás el balón en su intento de regate-, para esta vez deshacerse con éxito del meta y colocar la sentencia.
El filial racinguista, rival de los blanquiazules en la final tras eliminar a la Cultural Leonesa en los penaltis
El rival en la final del V Memorial Manolo Preciado fue el Racing B, que se clasificó por penaltis después de empatar (0-0) con el conjunto leonés que militará en el grupo I de 2ª división B. Los filiales, impecables desde el punto de penalti, penalizaron el único error de los castellano leoneses para meterse en la final (5-4).
Para esta cita Pablo Lago renovó por completo la alineación y optó por los otros once hombres que no habían sido de la partida ante el Ribamontán: Álex Ruiz en la portería; defensa formada por Camus, Luis Alberto, Cristian Moreno y Docal; Cusi y Víctor en el centro del campo; Dani Salas y Diego Rozas en banda acompañando a Cagigas y Barbero, referencias en ataque.
Al contrario que el partido de semifinales, este encuentro se caracterizó por la falta de ocasiones y la intensidad de ambos conjuntos en la línea de medios. El filial ingresó en el terreno de juego con cierta superioridad, presionando la salida de balón de la Gimnástica y realizando un pressing continuo sobre la sala de máquinas blanquiazul. Sin embargo, un par de arrancadas de Cagigas desestabilizaron la excelente presión del filial, que decidió dar un paso atrás.
Lejos de volverse locos, ambos equipos decidieron dar prioridad a la defensa y esperar al ingenio de alguno de sus atacantes. De esta manera, las únicas acciones de peligro llegaron por parte torrelaveguense a través de la estrategia. Cristian Moreno, Cagigas y Cusi pudieron desequilibrar la balanza pero no consiguieron perforar la meta santanderina.
Sin tiempo para más, la final se decidió por penaltis. Borja Camus inauguró la tanda con un pelotazo que fue repelido por el travesaño; los otros nueve penaltis se convirtieron y, de esta forma, el filial racinguista se proclamó campeón del V Memorial Manolo Preciado.